Así iniciamos una de las semanas más completas de colegas en la isla. El primero en llegar Felix. Al que vamos a hospedar en nuestro pequeño cuchitril.
Justo después de recogerlo y como es el único que ha llegado a las isla a una hora decente (media tarde) lo llevamos a dar una vuelta por Platja d'en Bossa y viendo el ambiente soleado que se disfrutaba la parada en el Bora era inevitable, aunque solo de visita ya que la fiesta gorda llegaría al día siguiente.
A la siguiente mañana le llevamos a una de las playas ya conocidas, platja d'es compte y después de comer... tocaba el festival. Nos calzamos nuestras chanclas y el bañador y de cabeza hacia Ibiza.
Llegamos al Bora sobre las 6 de la tarde, momento cuspide, llenisimo de gente con ganas de fiesta. Hasta 3 litros de sangría caieron en una tarde en la que nos encontramos con Miriam, Imma, Alba y Leti, unas amigas de St. Andreu y con un perico que invito a chupitos a los dos perícos que me acompañan.
Una de las mejores tardes de Bora Bora desde que hemos llegado.
Por la noche llegaban Aroa y Uri, una cena rápida en el Montemar y nos fuimos a apalancarnos en el apartamento ya que de madrugada llegaban dos visitantes más.
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